Fácil
15 min
301.3 kcal = 1,259kj /por porción
Carbohidratos | 27.4 g |
Energía | 301.3 kcal |
Grasas | 11.6 g |
Fibra | 4 g |
Proteína | 20.5 g |
Grasas saturadas | 2.4 g |
Sodio | 2432.8 mg |
Azúcares | 3.7 g |
¿Qué vegetales se pueden agregar a un sándwich de pollo?
Estas son algunas opciones de vegetales. Recuerda elegir alimentos frescos, además de lavarlos y desinfectarlos adecuadamente:
Lechuga: es crujiente y combina muy bien con el pollo.
Cebolla: tiene un sabor fuerte y una textura crujiente, sin embargo, si quieres suavizarla la puedes caramelizar o, para mantener su textura, sumérgela en agua fría con una pizca de sal por media hora.
Aguacate: tiene una textura cremosa que le da un sabor suave a las preparaciones.
Pepino: es de sabor suave y refrescante.
Tomate: es refrescante, jugoso y le da variedad y color al sándwich.
Col rizada: una verdura crujiente de sabor fuerte y con un toque picante.
Zanahoria: proporciona un sabor dulce y textura crujiente. Añádela rallada.
¿Qué tipo de salsas y aderezos agregar a un sándwich de pollo?
Algunas opciones que puedes añadir:
Mayonesa o salsa de tomate: son alternativas versátiles que puedes agregar solas o combinadas con especias en polvo para potenciar su sabor.
Salsa BBQ: tiene un tono dulce y picante que le da un sabor ahumado a las preparaciones.
Aderezo ranch y Cesar: de consistencia cremosa y sabor intenso, esto se debe a sus ingredientes pues están hechos con productos lácteos, el primero contiene especias, mientras el segundo tiene anchoas.
Salsas de ajo y mostaza: tienen sabor fuerte y un toque picante que las hace perfectas para realzar el sabor del sándwich de pollo.
¿Cuáles son las mejores bebidas para acompañar un sándwich de pollo?
Al ser un alimento versátil, puedes consumir un sándwich de pollo acompañado de cualquier bebida de tu preferencia. Sin embargo, algunas alternativas populares son:
Limonada: una bebida refrescante que mantiene un excelente equilibrio entre dulce y ácido.
Agua saborizada: agrega hierbas aromáticas frescas como menta, romero y hierbabuena, con algunas rodajas o zumo de las frutas que más te gusten. Incluso las verduras de sabor más fuerte son una excelente opción.
Té frío: es una alternativa refrescante que combina perfecto con cualquier comida.