Anímate a llevar a la mesa todo el sabor y delicadeza del salmón.
Quienes desean variar el menú de la semana o están cansados de comer lo mismo todos los días, una buena idea es incluir dentro de las opciones los pescados, siendo el salmón una deliciosa elección para crear con él variados y sencillos platos.
En Recetas Nestlé® queremos que nos acompañes a descubrir la versatilidad de este pescado con el cual podrás preparar exquisitas recetas con salmón que pueden ir desde el desayuno hasta la cena.
SALMÓN, UN PESCADO DELICIOSO
El salmón es un pez anádromo, es decir que nace en aguas dulces como ríos o arroyos, migra hacia mar abierto y nuevamente regresa cientos de kilómetros a contracorriente a agua dulce para reproducirse haciendo que sea muy rico y fibroso. El salmón es un tipo de pez azul al igual que el atún, las sardinas y las anchoas, el cual se caracteriza por tener una deliciosa carne de un color que puede ir desde el rojo hasta el naranja con un sabor que es suave y ligeramente aceitoso.
Aunque muchos consideren que es un alimento exclusivo de lujosos restaurantes la versatilidad del salmón ha hecho que se convierta en un ingrediente que complace desde los paladares exquisitos hasta los más descomplicados, siendo un pescado muy versátil con el que se pueden elaborar variados platos como sushi, pastas, filetes, ensaladas, sándwiches, canapés, brochetas, ya sea crudo, ahumado, asado, a la plancha, al horno, etc.
TIPOS DE SALMÓN
Actualmente existen variedades que provienen de los afluentes Océanos Pacífico y Atlántico que se denominan como salvaje, por otro lado están los que son de cultivo en piscifactoría. Entre ambos existen diferencias significativas tanto en textura como en sabor. A continuación, te contamos los tipos de salmón más populares que puedes encontrar.
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SALMÓN SALVAJE
El salmón proveniente de las aguas del Atlántico es de tonalidad rosa claro y tiene solo una especie migratoria perteneciente al género Salmo, en cambio el procedente del Pacífico es de textura sedosa y un color carmesí brillante con un excelente sabor haciendo que en el mercado se encuentre a un elevado costo y a diferencia del Atlántico acá encontramos cinco especies que son: el salmón real o chinook, el rojo, el coho, el rosado y el keta o chum.
SALMÓN COHO
También conocido como salmón plateado es de color naranja y con una consistencia parcialmente grasosa. Chile es uno de los mayores productores de esta variedad en el mundo exportando a países como Japón, China, Tailandia y Corea del Sur en presentación congelada.
SALMÓN DEL ATLÁNTICO
También conocido como Salmo salar es una especie muy popular en todo el mundo y apetecida por su suave sabor y gran tamaño llegando a alcanzar 150 cm de longitud máxima y hasta 39 Kg de peso, esta variedad es de color plateado con algunos puntos negros y carne de tonalidad rosa que hace que los platos preparados con este tipo de pescado sean muy vistosos y atractivos.
Aprende a preparar un salmón al limón y finas hierbas.
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SALMÓN DE CULTIVO
La piscicultura del salmón ha ido creciendo aceleradamente en los últimos 40 años a nivel mundial, corresponde hoy en día al 60% de la producción total del salmón. Es una actividad donde se crían en pequeños contenedores en tierra o en grandes zonas en el mar haciendo que el abastecimiento sea más abundante y por lo tanto más barato.
COCCIÓN DEL SALMÓN
El salmón además de poder consumirse fresco también permite que se pueda disfrutar bajo varias técnicas de cocción como al vapor, al horno, al sartén o a la parrilla. Aunque a simple vista parezca fácil de cocinar a veces requiere atención en sus tiempos ya que a menudo se seca, se vuelve duro o se desmorona.
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SARTÉN
Este es el método más utilizado ya que es fácil y se tiene un mayor control de la cocción al estar observando el pescado en todo momento.
Para empezar, se debe calentar una sartén y se debe añadir el salmón sofriéndolo 4 minutos por cada lado comenzando por la piel ya que esta no se quema por lo que es resistente al fuego ayudando a que se reparta el calor por toda la carne evitando que se reseque y permanezca jugosa.
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AL HORNO
Al horno el tiempo de cocción puede estar entre los 10 o 15 minutos por lo que los cortes ideales son enteros o en filetes. Para esto se debe precalentar el horno a 180°C y condimentar el salmón con sal, pimienta, especias y demás ingredientes que se desee.
Para una ocasión especial no dudes en preparar un salmón al limón. PARRILLA
Para los que gustan de los asados con una proteína diferente a la habitual o de los sabores ahumados cocinar el pescado a la parrilla es una excelente idea. Para empezar, debes precalentar el asador y llevar los filetes de salmón previamente condimentados con sal, pimienta, tus especias favoritas y un poco de aceite envueltos en papel aluminio para evitar que se pegue a la rejilla y dejar escapar los jugos de la carne. Dependiendo de la intensidad del calor de la parrilla, una cocción perfecta está entre los 8 a 12 minutos.
AL VAPOR
No es la forma más común de consumirla, pero los pescados también se pueden cocinar al vapor, siendo esta técnica muy sencilla teniendo como resultado un salmón jugoso en poco tiempo. Puedes utilizar vaporeras de bambú encima de cazuelas u ollas con agua hirviendo para que el vapor cocine el pescado en tan solo 10 minutos.
CORTES DEL SALMÓN
En el mercado podemos encontrar el salmón en diferentes presentaciones donde puede servir para una entrada, un snack o una cena elegante.
LOMO
Corresponde al corte que es a lo largo del pescado y se corta el lomo más ajustado a la espina para extraer la mayor cantidad de alimento como medallones donde por lo general tienen entre 3 a 4 centímetros de ancho.
MEDALLÓN
Esta pieza se obtiene de los lomos, sin piel y sin espinas y es en forma de rodajas grandes.
FILETE
Esta presentación es la más común ya que este corte se presta para todos los métodos de cocción anteriormente mencionados. Un filete es un costado entero deshuesado o una pequeña sección con o sin piel.
Los filetes pequeños son ideales para almuerzos o comidas rápidas mientras que los grandes son una gran opción para una cena ligera pero elegante.
DADOS
Los dados o los tacos son cortes que corresponden a los trozos irregulares pequeños sin espinas y sin piel con el que se pueden hacer recetas como tartas, ceviche o guisos.
Saca el chef que llevas dentro con esta receta de dip de salmón ahumado.
Recetas con salmón
ACOMPAÑAMIENTOS DEL SALMÓN
El sabor suave del salmón nos permite combinarlo con infinitos ingredientes, por eso te contamos los acompañamientos más comunes en las recetas.
VERDURAS:
Las recetas con salmón y verduras son las elegidas tanto para la hora de almuerzo o la cena ya que son comidas ricas, ligeras y con un gran efecto saciante.
Tienen la gran ventaja de que su preparación es sencilla y combina perfectamente con las verduras favoritas como el tomate, la zanahoria, los pimientos y el calabacín.
Acompaña esta receta de salmón a las finas hierbas con tus verduras favoritas.PAPA:
La papa con sus múltiples opciones ya sea en cascos, en puré, al horno, en chips, es un acompañamiento sencillo pero muy delicioso que va bien en cualquier momento del día.
ARROZ:
El arroz va bien con todo y este caso no es la excepción, puedes bañar tu salmón con alguna salsa o un filete al horno además de ser una receta deliciosa saciará tu apetito al almuerzo o como una cena ligera en la noche.
PASTA:
Esta es una excelente opción tanto para un almuerzo rápido como para una cena especial, puedes optar por tener un filete grande y acompañarlo con tu tipo de pasta favorita o mezclar el salmón en dados dentro de la pasta.
PAN O GALLETAS:
Si tienes invitados en casa y no sabes qué ofrecerles, una rápida y refinada opción es preparar rollitos, tostadas o galletas con salmón crudo o ahumado, de este modo tendrás un snack sencillo pero muy elegante para cualquier ocasión.
CÓMO CONSERVAR EL SALMÓN
En el mercado puedes encontrar el salmón fresco, congelado, enlatado o ahumado. Si optas por llevar a casa los dos primeros debes tener en cuenta que debes comprar los que tienen la piel suave y húmeda con olor agradable.
Al llegar a casa debes consumirlo lo más pronto posible, ideal hasta los dos días posteriores a su compra, de no ser así, es mejor congelarlo máximo por 2 meses teniendo en cuenta que una vez se congela y descongela no se debe volver a llevar al congelador.
FUENTES: