Delicioso plato de pollo japonés visto cenitalmente.

Técnicas Culinarias

Pollo japonés: ¿Cómo se hace?

El pollo japonés pondrá a prueba tus papilas gustativas con su gran ternura, además de la fusión de sabores que las distintas salsas y condimentos aportarán.

Este estilo de preparación se adoptó de influencias gastronómicas extranjeras, ganando rápida popularidad en la cocina local.

El origen del pollo japonés, conocido como "karaage," se remonta a la cocina tradicional japonesa, pero sus raíces están influenciadas por la introducción de técnicas culinarias extranjeras. Durante el período Edo (1603-1868), el consumo de carne era relativamente raro en Japón debido a las restricciones budistas. Sin embargo, con la apertura del país al comercio internacional a partir de la Restauración Meiji, en 1868, la influencia occidental comenzó a penetrar en la cultura gastronómica japonesa, introduciendo nuevas técnicas de cocción, como la fritura.

El término "karaage" originalmente se refería a un método de preparación que implicaba marinar y luego freír alimentos sin empanizado, como pescados o verduras. Sin embargo, con la llegada de las influencias culinarias de China, la técnica se adaptó al pollo, especialmente en la región de Kyushu. Aquí, los chefs comenzaron a marinar el pollo en una mezcla de salsa de soja, ajo, jengibre, y otros condimentos antes de freírlo, lo que resultó en un plato crujiente y jugoso que rápidamente ganó popularidad en todo el país.

El karaage se convirtió en una parte fundamental de la cocina casera japonesa y en un plato común en izakayas (tabernas japonesas) y bento (cajas de comida para llevar). Su versatilidad y sabor lo han hecho popular en eventos como festivales, picnics, y como parte de la comida diaria. Aunque se puede encontrar en muchas versiones, el karaage sigue siendo fiel a sus raíces: trozos de pollo deshuesado, marinados, recubiertos ligeramente en fécula de papa o choclo, y fritos hasta alcanzar una textura crujiente.

Hoy en día, el pollo karaage ha trascendido las fronteras de Japón y se ha popularizado en todo el mundo, convirtiéndose en un símbolo de la comida rápida japonesa. A pesar de su simplicidad, este plato refleja la habilidad de la cocina japonesa para tomar influencias extranjeras y adaptarlas a sus propios gustos y tradiciones, creando algo único y delicioso.

10 PREPARACIONES FAMOSAS CON POLLO JAPONÉS

El pollo es un ingrediente esencial en la cocina japonesa, adaptado a través de diversas técnicas y estilos que lo convierten en un plato versátil y delicioso. Desde recetas caseras hasta platos servidos en restaurantes de renombre, el pollo japonés ha ganado reconocimiento mundial por su sabor, textura y la maestría en su preparación. A continuación, te presentamos las 10 preparaciones más deliciosas y famosas con pollo en la gastronomía japonesa:

1. Karaage: pollo marinado en salsa de soja, jengibre y ajo; frito hasta lograr una textura crujiente por fuera y jugosa por dentro.

2. Teriyaki: pollo glaseado con una mezcla de salsa de soja, mirin y azúcar, creando un plato dulce y salado a la vez.

3. Yakitori: brochetas de pollo asadas a la parrilla, comúnmente sazonadas con sal o salsa tare (una salsa dulce a base de soja).

4. Oyakodon: un tazón de arroz cubierto con pollo cocido en una mezcla de huevo y caldo dashi, creando un plato reconfortante y sabroso.

5. Chicken Katsu: filetes de pollo empanados en panko (pan rallado japonés) y fritos, generalmente acompañados de salsa tonkatsu.

Platillo de pollo japonés katsu con arroz y salsa tonkatsu.

6. Tori no Tatsutaage: similar al karaage, pero marinado en una mezcla de salsa de soja y mirin antes de ser recubierto en fécula de papa y frito.

7. Chicken Nanban: pollo frito sumergido en vinagre y servido con una salsa tártara cremosa, típico de la región de Miyazaki.

8. Chanko Nabe con Pollo: un estofado nutritivo y sustancioso que incluye pollo, tofu, verduras y fideos, popular entre los luchadores de sumo.

9. Tori Soba: sopa de fideos soba con caldo a base de pollo, frecuentemente servida con trozos de pollo cocido y vegetales.

10. Teba Shio: alitas de pollo a la parrilla, sazonadas simplemente con sal y pimienta, destacando el sabor natural del pollo.


MÁS RECETAS CON POLLO:


Cómo acompañar adecuadamente tu pollo japonés

El pollo japonés, con su sabor profundo y versátil, se puede disfrutar solo o acompañado de una variedad de guarniciones que complementan y realzan sus sabores. Los acompañamientos tradicionales y modernos ofrecen texturas contrastantes, sabores umami, y frescura, haciendo que cualquier comida con pollo japonés sea una experiencia completa y equilibrada. Estos son los 10 mejores acompañamientos para disfrutar con pollo japonés:

1. Arroz gohan:

El arroz blanco al vapor es un acompañamiento clásico en casi cualquier comida japonesa. Su suavidad y neutralidad permiten que el sabor del pollo, ya sea teriyaki, karaage o yakitori, sea el protagonista.

2. Ensalada de repollo:

Esta ensalada simple de repollo finamente rallado, a menudo aderezada con una salsa ligera de vinagre o mayonesa, aporta frescura y un contraste crujiente al pollo frito o glaseado.

3. Tsukemono:

Los encurtidos japoneses, como el takuan (rábano amarillo), umeboshi (ciruelas encurtidas) o shibazuke (berenjena encurtida), ofrecen un toque ácido y salado que limpia el paladar entre bocados de pollo.

4. Miso Soup:

Una sopa caliente de miso con tofu, algas y cebolla verde es un acompañamiento reconfortante que equilibra el umami del pollo y ofrece una capa adicional de sabor.

5. Edamame:

Los fríjoles de soja hervidos y sazonados con sal son un aperitivo saludable y sabroso que complementa bien el pollo, especialmente en comidas informales como el karaage o el yakitori.

Fríjoles edamame con brócoli, para acompañar adecuadamente tu pollo japonés.

6. Onigiri:

Estos triángulos de arroz rellenos de ingredientes como salmón, umeboshi o atún, y envueltos en alga nori, son un acompañamiento sustancial que añade variedad a la comida.

7. Gyoza:

Las empanadillas japonesas rellenas de carne, a menudo de cerdo, pero también de pollo, son perfectas para acompañar platos de pollo, ofreciendo un bocado jugoso y lleno de sabor.

8. Tamago Yaki:

Esta tortilla japonesa ligeramente dulce, hecha en capas finas y enrollada, es un acompañamiento delicioso que ofrece un contraste suave y dulce al sabor salado del pollo.

9. Sunomono:

Una ensalada de pepino y algas marinas marinada en vinagre de arroz, azúcar y sal, que proporciona un contrapunto refrescante y ácido a las preparaciones de pollo más ricas.

10. Soba Frío:

Fideos soba servidos fríos con una salsa de inmersión a base de soja y dashi, son un acompañamiento ligero y versátil que se combina especialmente bien con pollo teriyaki o yakitori.

Empápate más de la comida asiática, una opción gastronómica elegante y con mucho sabor

APRENDE A PREPARAR POLLO JAPONÉS EN CASA

Preparar pollo japonés en casa puede ser una experiencia culinaria gratificante y deliciosa. Aunque algunos ingredientes japoneses pueden no ser comunes en todos los mercados latinoamericanos, es posible hacer versiones auténticas y sabrosas utilizando insumos locales. A continuación, te presentamos un paso a paso sencillo para preparar karaage, un popular plato japonés de pollo frito, con ingredientes que son fáciles de encontrar en América Latina:

  • Reúne los ingredientes: necesitarás de pechuga o muslos de pollo (deshuesados y sin piel), dientes de ajo, jengibre fresco, salsa de soja, sake (puedes sustituirlo con vino blanco seco si no lo encuentras), mirin (puedes usar una mezcla de azúcar y vino blanco si no lo tienes), fécula de choclo o fécula de papa, y aceite vegetal para freír.
  • Prepara la marinada: ralla o pica finamente el ajo y el jengibre. En un bowl grande, mezcla el ajo, el jengibre, la salsa de soja, el sake y el mirin. Si usas vino blanco y azúcar en lugar de mirin, mezcla el vino con el azúcar. Agrega el pollo cortado en trozos de tamaño bocado a la marinada y remueve bien. Cubre y deja marinar en la nevera durante al menos 30 minutos, o hasta 2 horas para un sabor más intenso.
Pollo japonés empanizado.
  • Empaniza el pollo: en un plato llano, coloca la fécula de choclo o de papa. Retira el pollo de la marinada y sacude el exceso de líquido. Luego, cubre cada pieza de pollo con la fécula, asegurándote de que estén bien empanizadas y listas para freír.
  • Fríe el pollo: calienta suficiente aceite vegetal en una sartén profunda o en una freidora. Fríe las piezas de pollo en tandas durante 5-7 minutos, o hasta que el pollo esté dorado y crujiente por fuera. Usa una espumadera para retirar el pollo y colócalo sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
  • Sirve y disfruta: sirve el pollo karaage caliente, acompañado de una rodaja de limón y una ensalada fresca de repollo si lo deseas. Este plato es perfecto para compartir como aperitivo o como parte de una comida principal acompañado de arroz y otros platos japoneses.

Fuentes:

Preguntas frecuentes

1. ¿Cuál es la diferencia entre karaage y otras preparaciones de pollo frito en Japón?

Karaage se refiere específicamente a trozos de pollo marinados en una mezcla de salsa de soja, ajo y jengibre, recubiertos con fécula de choclo o de papa y luego fritos. A diferencia de otras preparaciones como el chicken katsu, que se empana en panko (pan rallado japonés) antes de freír, el karaage tiene un recubrimiento más ligero y crujiente. Además, el sabor del karaage es más complejo debido a la marinada, lo que lo diferencia de otras formas de pollo frito en la cocina japonesa.

2. ¿Cómo puedo hacer que el karaage quede más crujiente?

Para obtener un karaage más crujiente, asegúrate de recubrir bien el pollo con fécula de choclo o fécula de papa antes de freírlo. Además, fríe el pollo en tandas pequeñas para evitar que la temperatura del aceite baje demasiado. Una técnica utilizada por muchos cocineros japoneses es freír el pollo dos veces: primero a una temperatura más baja para cocinar el interior, y luego a una temperatura más alta para dorar y crujir el exterior.

3. ¿Qué salsas son ideales para acompañar el pollo japonés?

El pollo japonés, especialmente el karaage, se puede acompañar con una variedad de salsas según el gusto. La salsa de soja mezclada con un poco de jugo de limón es una opción clásica y simple. Otra alternativa popular es la mayonesa japonesa (más suave y dulce que la mayonesa regular), o incluso una salsa picante para quienes prefieren un toque de calor. También se puede acompañar con salsa ponzu, una mezcla cítrica de salsa de soja y vinagre, que añade un sabor fresco y ligeramente ácido al plato.